A Maella se llega por la carretera A-221, desde Caspe. Previamente a la visita de la villa, se recomienda tomar el desvío hacia Mazaleón para subir, en primer lugar, al Monte Calvario, donde se ubica la ermita de Santa Bárbara, construida en el siglo XVIII, y desde donde se aprecia una vista general de la villa y su feraz vega.
A la bajada puede aparcarse el coche junto a una estatua de Pablo Gargallo en la avenida de su nombre, que popularmente llaman el Bocheret, que se ha enriquecido recientemente con otras obras de Pons Cirac y Joaquín Hernández, otro artista maellano actual. Allí mismo están la casa natal de Pablo Gargallo Catalán, que alberga una exposición permanente de obras, como la Virgen, realizada por Gargallo a los 13 años, con terracota, y el busto de Petra Catalán, su madre, en bronce. Hay, además, un fondo bibliográfico y obras de arte de otros autores maellanos que han expuesto en este espacio.
Muy cerca está la plaza de España, donde puede verse el Palacio Municipal, con una airosa torre del reloj. A uno y otro lado de la casa consistorial existen dos bellos espacios porticados, la Lonja y los Porches, de ambiente medieval; detrás, la llamada Plaza Alta, lugar céntrico y recoleto; y delante un recrecido del pavimento de la plaza de España que llaman "el mandilet". Desde el ayuntamiento, por las calles Mayor y Moleta, se puede subir a las imponentes ruinas del castillo, destruido en 1837 durante las guerras carlistas. Entre sus más ilustres propietarios estuvieron Miguel Pérez de Almazán, secretario de los Reyes Católicos, cuyas armas lucen en la puerta principal, y el Conde de Aranda.
El ayuntamiento de Maella. Este relevante edificio está construido en piedra de sillería y su origen se debe a los caballeros de la Orden de Calatrava. En el balcón se ve la fecha de una reforma, año 1859. La torre tienje 48 m. de altura y una primera planta cuadrada románica, a la que sigue la edificación mudéjar en ladrillo con profusión de decoración de azulejos de Muel. En el segundo cuerpo, de planta octogonal, hay tres relojes para el buen gobierno de la villa. La cubierta, de bronce, es coronada por "el gallet". En la primera planta, en arco sobre la calle, se encuentra la capilla de la Virgen del Portal.
Hacia el norte, lindando con la calle Virgen del Pilar, permanece la espectacular muralla, con cinco cubos semicilíndricos. Por allí se llega a la iglesia parroquial de San Esteban, que conserva restos románicos aunque su construcción se debe a varios periodos. Tiene una sola nave, ábside semicircular con bóveda de crucería y capillas entre los contrafuertes con motivos decorativos platerescos.
De nuevo en la plaza de España, se toma la calle de la Virgen del Portal y San Francisco hasta la Glorieta, centro de todas las fiestas de Maella. En su lado occidental, se levanta un moderno centro de salud al lado de la iglesia de Santa María, que fuera convento granciscano hasta la desamortización. Conserva restos de la ermita medieval sobre la que se construyó.
Saliendo por carretera hacia Cataluña, puede verse una singular plaza de toros, la única de la comarca. La carretera A-1412 bordea el Matarraña camino de Fabara. A unos 4 km se localizan las pintorescas ruinas el convento de la Trapa, cenobio que se inició en el siglo VI con los monjes de San Benito. Este lugar es el proganista de la leyenda de Santa Susana, pues se dice que allí estaba enterrada. Fue reconstruido por calatravos y habitado por cistercienses y, en el siglo XVIII, por trapenses. Un enclave medieval que todavía sale en los mapas como Villanueva de Almazán, recordando que el señorío de Maella perteneció a los Almazán.
Maella, cuna de genios.
El escultor Pablo Gargallo Catalán (1881-1934) es el maellano más renombrado. Siendo niño se trasladó con su familia a Barcelona, iniciando sus estudios artísticos con Arnau y Vallmitjana. En 1903, pensionado por la Academia de Bellas Artes, inicia sus viajes y repetidas estancias en París hasta que en 1923 se queda definitivamente. Domina el hierro con forja y martillo, rellenando vacíos y creando formas plásticas jugando con los contornos de sus figuras.
En Aragón se le reconoce con una gran exposición en la DPZ en 1972 y después con la creación del museo que lleva su nombre y acoge gran parte de su obra en Zaragoza. Maella guarda varias piezas importantes en su casa natal.
PARA LA VISITA A LA CASA NATAL DE PABLO GARGALLO, SE PODRÁ REALIZAR LOS SÁBADOS DE 18 A 20 Y LOS DOMINGOS DE 12 A 14 H.
El pintor y escritor Hermenegildo Estevan (1851-1945) se traslada a los seis años a Caspe, donde se inicia en la pintura con los artistas caspolinos Agustín Llop, autor del más representado cuadro del Compromiso de Caspe, y Ramiro Ros. Se licenció en derecho civil y canónico. En 1882 va como pensionado a la Academia de Roma y cuatro años más tarde es nombrado secretario de la misma, donde continuará hasta 1933. Siguió viviendo en Roma hasta su muerte. Su obra es amplísima, tanto en dibujos y pintura como en acuarela. Fue retratista, paisajista, escritor, reportero gráfico, Caballero de la Orden de Carlos III, ...
Antonio Pons Cirac, máximo creador de arte en vidrio , marchó de niño a vivir a Barcelona y aprendió la talla industrial del cristal en el taller del también maellano Joseph Payes. Desde 1953 simultaneó la talla industrial y la artística de creación. Maella le rindió homenaje y le dedicó una calle en 1983 y la Generalitat de Catalunya le concedió la Creu de Sant Jordi en 1990.
En la actualidad, siguen los artistas: José Peris Lacasa, gran músico, profesor, compositor y director, con reconocimiento internacional e intensa actividad nacional; Joaquín Hernández Pallisa, formado en la Escuela Massana de Barcelona, realiza escultura figurativa en mármol, terracota, bronces, etc. con una cuidada ejecución de líneas; Miguel Estaña, pintor con original obra en papel y cartón, y Eduardo Lacasa Godina, polifacético artista que domina casi todas las especialidades, simultanean la creación artística con sus profesiones.
VISITAS GUIADAS
Desde la Comarca Bajo Aragón-Caspe / Baix Aragó-Casp y en colaboración con el Ayuntamiento de Maella, se van a promover este verano, a partir de Julio de 2011, una serie de visitas guiadas por la localidad y por sus principales monumentos, como parte de la mejora de la oferta turística que se está llevando en nuestro destino, y con vistas a mejorar la imagen y la experiencia turística de los visitantes que se acercan a conocer nuestro patrimionio, nuestra cultura, nuestra naturaleza, nuestras fiestas y nuestros productos.
VISITAS GUIADAS: Durante todos los fines de semana de verano teneis la posibilidad de visitar la localidad de Maella, hacer un recorrido urbano por su historia y arquitectura, así como visitar el museo del artista local de renombre Pablo Gargallo, y las recién restauradas Bodegas del Castillo de Maella.
